Teatro del horror y de la poesía

Víctor Acero

12/06/2021

VACUNA

No es fácil ver en Madrid obras de autores británicos. La cantera inagotable que son los clásicos del “Siglo de oro” y los de la “Edad de Plata”, junto con una buena cantera de autores jóvenes -y no tan jóvenes- contemporáneos, deja poco espacio a experimentos anglófonos.

Martin McDonagh no es tanto un experimento como una apuesta segura de los Teatros del Canal para acercarse a este singular y original autor, al que más de uno y una conocerá como guionista y director de la premiada “Tres anuncios a las afueras” o de “El irlandés”.

Las obras de McDonagh son duras, muestran el horror consustancial a la vida en un mundo que es hostil. Personajes golpeados y maltratados, sufrientes. Y al mismo tiempo muestran su confianza en el arte, la literatura, el teatro, para sobrevivir.

La historia de “El hombre almohada”, por tanto, tiene poco que ver con la suavidad o el reposo que de su título se puede intuir. Muy al contrario, nos pone ante una serie de situaciones a cada cuál más horrible, macabra y angustiosa. Nos mete en una escena “subterránea” e inquietante, de tintes kafkianos, donde dos policías interrogan a una escritora como sospechosa de una serie de crímenes infantiles que reproducen la trama de varios de sus relatos. Unos cuentos llenos de poesía, e incluso belleza y ternura, pero también de brutalidad y de violencia.

Varios de estos relatos son contados y representados en escena. Oportunidad que aprovecha el director, David Serrano, para utilizar diferentes formas teatrales (máscaras, títeres, teatro de sombras…) que refrescan las algo más de dos horas que dura la obra.

Sobre las tablas, cuatro actores reconocidos: dos más cinematográficos y televisivos, Belén Cuesta y Ricardo Gomez; y dos animales teatrales como son Manuela Paso y Paco Codina. Estos últimos solventan mucho mejor sus papeles, pero en general el tono es bueno y el poderoso texto y la brutal trama lo aguantan todo.

“El hombre almohada” se representa en los Teatros del Canal hasta el 20 de junio. AQUI

(foto: Javier Naval)

Merece la pena ir a ver “El hombre almohada” porque no se sabe cuándo habrá oportunidad de volver a disfrutar a McDonagh por estos lares.