¿Ocultas la edad en tu currículum?

redacción_soy50plus

12/12/2023

Los 55plus somos y seremos más. Soy50plus

Ya no nos extraña que, cuando las empresas anuncian recortes de empleo, los 50plus seamos los más afectados. Sin ir más lejos, el último ERE anunciado por Telefónica prevé la salida de la compañía de unos 5.000 empleados, la cuarta parte de su plantilla, y la mayoría serán de 55 años en adelante. En teoría, la ley prohíbe esta práctica, pero las empresas se buscan los vericuetos legales para quitarse a una fuerza laboral que cobra más, entienden menos preparados para las necesidades digitales y a los que no compensa formar o reciclar en términos de rentabilidad.

Desde 2008, el desempleo entre los mayores de 55 años ha crecido un 17%, según el último Mapa del Talento Senior de la Fundación Mapfre, y el paro de larga duración se da más entre los seniors que entre los jóvenes. Si la población entre 55 y 70 años ha crecido en 2,3 millones en estos quince años, ese aumento no se ve reflejado en el mercado laboral.

Cierto que muchas de las bajas de trabajadores sénior son incentivadas -aunque ya no tan jugosamente como antes- y puede que haya quien ya no tenga la necesidad económica de volver a trabajar, aunque sí otras motivaciones. El problema viene cuando esos 50plus que se ven en paro necesitan o simplemente quieren volver a trabajar. Este reportaje de Raquel Pascual en El País nos ofrece una completa visión del asunto y, sobre todo, nos trae casos reales de personas que se las ven y las desean para encontrar un trabajo. Incluso sintiéndose en el mejor momento de su vida profesional.

Cumplir al 100% los requisitos para un puesto de trabajo y que ni siquiera te llamen; que cuando acudas a la entrevista, notes en la expresión del entrevistador que ya te ha descartado nada más verte; que seas especialista en atención al cliente, pero te digan que sólo puedes ejercerla de forma telefónica, nunca presencial. O, en fin, gente que hace todo lo posible por disimular su edad, y desde luego, no indicarla en el currículum. Porque saben que, independientemente de su bagaje y sus aptitudes, automáticamente les rechazarán.

Y un dato muy interesante que arroja también el reportaje: en 2008, España era el cuarto país de la Unión Europea que menos desempleados mayores tenía; hoy es el cuarto que más tiene. En concreto, concentramos el 27% de los parados de más de 50 años que viven en los Veintisiete.

En definitiva, por mucho que nos esforcemos en desmontar mitos y se hable profusamente de la necesidad y a la vez oportunidad de aprovechar el talento senior, a la hora de la verdad, las empresas lo siguen teniendo claro: no son para viejos.

Disimular la edad ya no es práctica sólo de actores y actrices, de gente que vive de su físico o para no perder gancho en las relaciones sociales. Ahora hay mucha gente que lo hace para encontrar un trabajo.