Prueba a esta  crema de remolacha, en su versión fría o caliente. Porque es un estupendo plato para el almuerzo, como entrante, aperitivo e incluso para cenar. 

¡Ponte el delantal que vamos directos a prepararla!

Si compras la remolacha cocida, sólo tienes que trocearla e introducirla en el vaso de una batidora para triturar los trozos de la remolacha. Ten en cuenta que mancha mucho, si no quieres tener los dedos rojos, te aconsejo uses guantes.

Pero si prefieres comprar la remolacha fresca, tienes que cocerla en agua con sal y pelarla antes de cortarla para triturarla.

A continuación añadimos la mitad del caldo de verduras y seguimos triturando. Luego agregamos la nata líquida y trituramos de nuevo. Y terminamos incorporando el resto del caldo y probando el punto de sal.

Si te gusta templada o caliente, puedes calentarla en un cazo o el microondas.

Finalmente, cuando lo emplatamos, decoramos con sésamo blanco y sésamo negro. Y con un poco de cebollino picado por encima y…  ¡¡¡ Listo para disfrutar !!!

Os espero en la próxima RECETA 🙂