Ya sabemos que Donald Trump ha tomado posesión, a sus 78 años, como el presidente más longevo en la historia de Estados Unidos. Pero no hace falta irse tan lejos. Es más, podemos quedarnos en España.
Estos días hemos asistido al relevo en la presidencia de Telefónica. El nuevo presidente, Marc Murtra, tiene 52 años y sustituye a José María Álvarez-Pallete, que tiene 61. La compañía cuenta actualmente con cerca de 27.000 empleados en España, con una edad media que, según distintas fuentes, oscila entre 39 y 45 años. A finales de 2023 firmó un ERE que supuso la salida de 3.421 empleados mayores de 55 años.
En nuestro país, el 46,5% de los desempleados tiene más de 50 años, lo que suponer casi uno de cada dos parados. En total, según datos del segundo trimestre de 2024, más de 818.000 profesionales 50plus se encuentran en paro.
Sabemos que en España existe un acusado nivel de edadismo en las empresas a la hora de contratar. Perviven estereotipos y perjuicios hacia la productividad de los empleados a partir de cierta edad. Según el INE, a una persona mayor de 55 años le cuesta el doble encontrar empleo que a alguien joven.
Por otro lado, no abundan en nuestro país políticas públicas de empleo que fomenten su contratación. Ello, teniendo en cuenta que el 15,23% de la población española tiene entre 55 y 64 años.
Pero al final, todo depende del trabajo que hagan y del puesto que ocupen. Si se trata de empresarios o directivos, por no hablar de políticos, la cosa cambia. Ahí tenemos a Florentino Pérez con 77 años, a Antonio Brufau con 76 o Ana Patricia Botín con 64, al frente de sus empresas. De hecho, cerca de la mitad de los presidentes de Ibex 35 superan la edad de jubilación. Pero cuando sus empresas deciden reajustar plantillas, indefectiblemente prescindirán de los más mayores. ‘Porque es necesario rejuvenecer la plantilla para ser competitivos’, dirán.
La mitad de los presidentes de grandes empresas españolas rozan o superan la edad de jubilación. Nadie duda de su capacidad para estos puestos. Pero cuando se trata de sus plantillas, la política es rejuvenecerlas.