Viaje de otoño, novela primaveral

Enrique de Pablo

18/02/2022

Viaje de otoño novela primaveral en soy50plus

Pensaba que estaba escribiendo un relato más, como otros que tiene escritos, pero entonces la cosa se complicó. Así lo explica Carmen Menéndez, que a los 73 años acaba de publicar su primera novela. Y la ha presentado esta semana, en un bonito acto en la Biblioteca Trías, en la antigua Casa de Fieras de El Retiro madrileño.

Una escena diríamos cotidiana en un pueblo, un niño, una bicicleta… Y la historia empezó a crecer. Carmen se identifica como escritura brújula más que como escritora mapa. Éstos son los que se hacen el esquema previo antes de ponerse a escribir. Aquellos, en cambio, empiezan por un episodio, una situación, y van dejando -o provocando- que las cosas sucedan.

Y que los personajes se expresen. Dice la flamante novelista que le gusta dejarlos libres, desenvolverse en su mundo. Ella va apuntando y transcribiendo lo que dicen y hacen. A veces, confiesa, intenta forzar las cosas y entonces esos personajes se incomodan. Es mejor entonces dejarlos en paz, volver a escribir al día siguiente, ya con otro talante, y los diálogos y la historia vuelven a fluir.

“Viaje de otoño”, editado por La Discreta, recrea un viaje mucho más que vital de su protagonista, que pretendidamente otoñal y a ninguna parte, termina resultando iniciático y revelador. ¿Autobiográfico? No le gusta escribir de sí misma, pero es posible, a veces se lo dicen, que sin darse cuenta se plasme algo de ella.

Así, con esa sencillez y humildad, expresa Carmen Menéndez las sensaciones de su nueva faceta de novelista. Que no de autora, pues ya tiene mucho escrito en su vida y, sobre todo, leído, que es la escuela fundamental para hacerse escritor.

Un otoño bien vale una novela, aunque sea la primera a los 70plus.

La novela está disponible aquí Viaje de otoño – La Discreta

El ejemplo de Carmen puede servirnos a muchos 50plus que pensamos que es tarde para escribir nuestro primer libro. En lo visto o vivido, cualquiera podemos tener una o muchas historias pendientes de ser contadas. Es cuestión de ponerse… y dejar que los personajes y las situaciones nos lleven.