¿Qué 50plus no veía El hombre y la Tierra? Entre otras cosas, porque sólo había un canal de televisión. Pero, sobre todo, porque fue un programa que nos marcó a todos. Su primera emisión tuvo lugar el 4 de marzo de 1974. Es decir, ha cumplido 50 años.

Efectivamente, Félix Rodríguez de la Fuente ha sido uno de los mayores influenciadores de nuestra generación -cuando no existía el término influencer. Con su obra, sus colecciones en fascículos, sus programas de televisión, sobre todo este, fue quizás la primera persona en España que creó conciencia en torno a la naturaleza y sus habitantes, los animales. La importancia de respetarlos y preservarlos. Tampoco se hablaba entonces de sostenibilidad ni de criterios ESG.

Recordemos que la primera serie de El hombre y la Tierra se rodó en Venezuela y nos trajo a casa la selva y la fauna amazónica. Ahí quedaron episodios como el de las anacondas que rescataban de regiones asoladas por la sequía; los capibaras, esos enormes roedores a los que mataban a palos para comercializar su piel; por supuesto, el jaguar, verdadero rey de aquellas selvas, que allí llaman tigre; o los yanomami, posiblemente la primera población indígena a la que llegamos a conocer si fueran de la familia.

El segundo bloque ya lo dedicó Félix a la fauna ibérica, y fue con el que alcanzó mayor éxito. Nos hizo darnos cuenta del enorme patrimonio natural que atesoramos en nuestro territorio. Por ejemplo, nuestra rica y variada población de aves rapaces, con especies únicas en el mundo como el águila imperial, entonces en peligro crítico de extinción. Inolvidables los capítulos que dedicó al lobo, al lince ibérico, al buitre negro, a la cetrería… Y también nos hizo descubrir paisajes que se nos antojaban paradisíacos y que no andaban tan lejos, como la Sierra de Cazorla o Las Tablas de Daimiel.

El programa hizo descubrimientos que obtuvieron reconocimiento internacional, como el de los alimoches que aprendían a cascar los huevos con piedras sin habérselo visto hacer a sus semejantes. También hubo episodios polémicos, como el que narraba la relación del hombre con el lobo y no nos dejaba precisamente en buen lugar -una controversia que hoy sigue vigente. Nos dejó secuencias que se han quedado para siempre en nuestra retina y que nos mostraron la belleza, pero también la dureza, de la vida salvaje. Y como Félix era un sensacional comunicador, nos metía en las propias escenas como si estuviéramos allí. Y nos sumaba a su causa.

La tercera parte no tuvo un buen final. Estaba dedicada a Canadá y Alaska y sólo constó de 14 episodios. Mientras rodaba los que iban a ser los dos últimos, Félix Rodríguez de la Fuente falleció en accidente de helicóptero, junto con los cámaras Teodoro Roa y Alberto Mariano Huéscar, además del piloto. La noticia conmocionó a España y nos dejó huérfanos. Quién sabe lo que hubiera sido de El hombre y la Tierra, hasta cuándo hubiera durado y a qué lugares del planeta azul nos hubiera llevado. De no habernos levantado con la noticia aquella maldita mañana de marzo de 1980.

Quedan todos los premios y reconocimientos que recibió el programa, nacionales e internacionales. En 2000, la Academia de las Ciencias y las Artes de Televisión lo eligió la Mejor Producción de la Historia de la Televisión en España. Ahí es nada. Pero queda en nuestro imaginario. Tanto como 50 años después de la primera emisión, aunque ha habido reposiciones, mantenemos intacto el recuerdo y cada momento: la sintonía, el sonido agreste, el vuelo del águila… y la voz de Félix.

Y tampoco hace falta echarlo de menos. Hoy mismo podemos ver todos los episodios en RTVE Play. Durará 50 años y más…