Aún no sabemos si finalmente se va a aprobar la reforma laboral, con qué apoyos y, desde luego, con qué resultados. Lo que sí podemos decir, a día de hoy, es que el texto presentado, consensuado entre Gobierno, patronal y sindicatos, dice muy poco del empleo senior. Y eso que todos los que lo negociaron son 50plus.

Limitar la temporalidad de los contratos y reducir la precariedad son las grandes aspiraciones de esta reforma del marco de trabajo. Y es de esperar que nadie será ajeno a esta mejora de las condiciones laborales, así como de los cambios introducidos en la negociación de los convenios y en la articulación de los ERTEs.

Sin embargo, se echa de menos algún apartado relativo a la incentivación del empleo en el segmento 50plus, o al menos declaraciones de intenciones que pongan el acento en la importancia de este colectivo. Que, ya lo sabemos, es el primero en sufrir las consecuencias cuando las empresas tienen problemas y el último en el que se piensa cuando se abren procesos de selección. Es más, cuando corren vientos favorables a retrasar la edad de jubilación.

Y cuando parecemos no entender la tendencia. Como señala Gonzalo Avello, cofundador y CEO de Connecting Visions en este artículo, “nuestras autoridades deberían tomar nota de las principales economías del mundo que ya están evolucionando sus legislaciones laborales (…) Si no empezamos a movernos en esta dirección, el riesgo de dejar fuera del mercado laboral de manera permanente a una gran parte de la población mayor de 50 años puede ser muy elevado y el impacto para la economía nacional y la sociedad en su conjunto sería muy grave”.

Otros artículos y opiniones que nos pueden ilustrar:

Los sénior, grandes olvidados por la reforma laboral (65ymas.com)

España creará en los próximos dos años más de un millón de empleos | Las Provincias

El paro de los mayores de 55 se triplica, pero Escrivá pide retrasar el retiro (theobjective.com)