No soy muy dado a hablar de premios, pero a los GOYA les tengo cierto cariño: comenzaron en el año 86, cuando muchos 50plus mirábamos el cine español con cierto desdén, para que engañarnos. Sólo el más comprometido conseguía atraernos, para el resto, lo mejor era lo foráneo. Sí es verdad que tengo la sensación de que, por aquel entonces, nuestro séptimo arte todavía estaba buscando su lugar y eliminando complejos.
2022, el mejor año de cine español
Largo recorrido desde entonces hasta este 2022 que, coincido con muchos, es de largo el mejor año de cine español que recuerdo. Ahora un GOYA supone para una película un empujón en taquilla. Sólo falta que todos recuerden que la ceremonia de entrega debe de ser la gran noche del cine español y que cualquier otro interés sólo servirá para restarle su merecido protagonismo.
Por lo tanto, este año es de celebración, y las recientes nominaciones, por lo general, me gustan. Echo de menos mayor presencia de La Consagración de la Primavera, que personalmente me parece luminosa, y Un Año, Una Noche, tan inteligente como dura. Y por supuesto, me duele que una obra como Pacifiction de Albert Serra, reconocida por Cahiers Du Cinema Francia como la mejor película del año, ni siquiera aparezca. Pero no hay lista que no sea cuestionable y en esta son todos los que están.
Y más películas interesantes…
Espero, eso sí, que Alcarrás, de la que ya os hable aquí, consolide la carrera que comenzó con el Oso de Oro del Festival de Berlín, la película y su directora. No tengo preferencias en la categoría de mejor actor, pero en la de actriz creo que es de justicia que Anna Castillo vea premiada su vitalidad en Los Girasoles Silvestres. Y ¿hay alguien hoy día que no apueste por Luis Zahera y su terrorífica presencia en As Bestas?
En cualquier caso, hay mucho bueno. La ternura de Cinco Lobitos, la fascinación de El Agua, el cine de carcelario muy muy bien hecho de Modelo 77, y más y más….sin duda, el 2022 el mejor año del cine español.
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No sé para vosotros, pero para mí el cine español es de lo que más satisfacciones me ha dado este año, y todavía me quedan por ver algunos estrenos muy interesantes. Llamadme chauvinista… y os equivocaréis.